¡Buena tarde, amores cinéfilos! ¿Cómo estáis? ¿Dispuestos a embarcaros en una nueva aventura cinematográfica conmigo como cada dos semanas? En este caso, os anticipo que tendremos opiniones divididas, especialmente si contamos con los fans del MCU como tal y los que… Bueno, iba a decir «tienen criterio de calidad», pero prefiero que la cizaña empiece un poco más tarde 😛 ¡Comenzamos!
Tras la derrota de Thanos y la restauración de la paz en la Tierra, los Vengadores se disolvieron y el semidiós Thor decidió retirarse de la escena pública. Para dejar a todos los Asgardianos que habitaban en la Tierra, dejó el mando en manos de Valquiria y ella se ha ocupado de mantener a su pueblo protegido en un remoto pueblo de la costa estadounidense… Aunque a veces se convierta en un parque temático donde presentar las bondades de Asgard a los terrícolas corrientes y eso contribuya a su supervivencia económica. Por otra parte, esto no significa que Thor se quede ocioso: sus antiguos compañeros y Guardianes de la Galaxia le encargan de vez en cuando alguna misión en la que colaborar y eso ha permitido que el semidiós no se aburra hasta la fecha. Algo que se acentuará cuando un misterioso asesino de dioses ancestral y en apariencia inmortal se presente en la Tierra y trate de acabar con él y todos los que quedan como él. Además, por si fuera poco, su antigua novia Jane y paciente terminal de cáncer parece haber encontrado una solución temporal para engañar a la muerte en los fragmentos del destruido Mjolnir. ¿Cuál será la decisión de Thor si llega el momento de la verdad para la gente que ama?
RESEÑA
Bueno, pues… ¿Por dónde empezar?

Quizá lo mejor sea hacer un poco de retrospectiva y reflexionar sobre lo que hemos visto hasta la fecha del MCU, sobre todo en los últimos 3-4 años y sobre todo contando desde «Vengadores: Endgame». Como ya sabéis, no soy la más devota de las fans de esa película y de hecho me gusta más «Vengadores: Infinity War». No, no tiene que ver que Iron Man aka mi Vengador favorito la espichara en la primera que menciono, la aversión a esa película me va más allá de todo eso y creo que fue la menor de mis preocupaciones; pero podéis echarle un ojo de vuelta a la reseña para refrescar si no os acordáis 😉

En general, diría que para mí ese fue sencillamente el punto de inflexión en el que el Universo de Marvel (el Cinematográfico o MCU, al menos) empezó a ir cuesta abajo, sin frenos y algo de culo. No digo que no haya habido alguna serie o mini-serie que no me haya gustado, porque ha habido excepciones (Hawkeye, por ejemplo, que tes un Vengador al que también le tengo bastante cariño -salvando que la intención de «feminizar» al personaje con Kate Bishop me pareció de nuevo un «Endgame-intento» de transformar a Vengadores en personajes más trending-friendly– y estoy pendiente de saber si van a hacer más o no para reseñarla en el blog; Halcón y Soldado de Invierno me sorprendió para bien, también tengo que ver si le hago un hueco en el blog porque me da que también fue 1 temporada y ya… o Caballero Luna, que vi la primera temporada este verano y me encantó, sin discusión y por muchos motivos).

Sin embargo, ya habéis podido comprobar en algunas de mis reseñas recientes que lo que son películas en Disney + (más en época COVID, tipo Viuda Negra) o en el cine (Doctor Extraño en el Multiverso de la Locura) han gustado así, así, o no me han convencido del todo. De Eternals, que hice microrreseña recientemente en mi Facebook y Twitter, mejor ni hablamos… De hecho, ya veréis en el futuro que en los últimos tiempos casi me estoy decantando por las nuevas entregas de DC que parece que tienen algo más de interés. Y es que en concreto Thor: Love and Thunder me parece uno de esos ejemplos de «cómo hacer una m***** con suficiente dinero y poco cerebro». Vamos a evaluar el porqué…

Primero, una cosa positiva que sí diré -creo que lo único de toda la película- es la presencia de un actor de talla grande como es Christian Bale -interpretativamente, malpensados-. Y es que poner a un villano en manos de alguien que sabe lo que hace y no tiene necesidad de que nadie le dirija, o eso parece, para hacer un buen papel pues se nota. De hecho, es tan buena su interpretación e incluso tan incómoda en algunos casos -me sorprendió la escena con el insecto estelar y lo de arrancarle la cabeza porque sí, la verdad- que casi parece que su presencia en esta cinta es un error, ya que el resto de la misma es como mínimo una doble parodia de sí misma… O de lo que podía haber sido, la verdad es que no sé qué querían hacer los guionistas.

Y es que, vamos a ver: un poquito de humor está bien, en dosis medidas; en este caso, me hicieron gracia las conversaciones entre Thor y su mega-hacha nueva post-Vengadores, estaban curiosas y dentro del ambiente de la escena. Pero lo que no puede parecer es que, por ejemplo, Natalie Portman sólo se toma las cosas en serio y hace su trabajo cuando interpreta a una paciente terminal de cáncer y no cuando hacer de… «¿Thor?» ¿»Thora?». La verdad, no sabía ni cómo interpretar ese momento en que coge a Mjolnir y se convierte en la versión femenina y casi más poderosa que el supuesto protagonista. Y como siempre: ¿por qué no haces alguien con indentidad propia, que no necesite imitar o «copiar» a su homónimo masculino para hacer un personaje que de verdad sea fuerte e independiente? Es que al final, entre esta y She-Hulk, el componente femenino más visibilizado del MCU parece una broma,disculpadme ser tan cruda…

Aparte de eso, me sigo preguntando qué clase de camión de dinero le pusieron delante a Russel Crowe para ponerse en ridículo como Zeus de semejante manera como lo hizo en esta película… Es como si fuera una comedia absurda en la que para un dios todopoderoso han cogido al comediante de turno, y perdón por los comediantes porque algunos en su género los hay muy buenos. Pero, sinceramente, yo esperaba ver de verdad una historia de superhéroes o gente con poderes, no una «Marvel Movie», si me entendéis los de mi generación que habéis visto las clásicas parodias que tuvieron éxito a principios de los 2000…

Al menos, diré, el final no fue demasiado Deus ex Machina salvo porque de repente todos los niños Asgardianos peleaban mejor que Thor y no me voy a meter en las cuestiones de género que se dejaron caer en ciertos momentos, que alguno me trincha… Aunque me pareció innecesario el apunte y el «box-ticking«, para qué engañarnos, pero lo dejaré ahí. Me refería quizá más al final, final como tal, aunque sí que es cierto que de un tiempo a esta parte Disney tiene una tendencia muy aburrida de redimir a todo villano viviente y sin excepción, sea hombre, mujer o no-binario. Quizá en los últimos dos casos se podría considerar que se ve más, pero está abierto a debate con ejemplos tangibles para ver quién gana en los últimos 5 años… 🙂 No dudéis en dejar vuestra opinión en los comentarios.
Con todo esto, diría que la película no se merece más de un 1.5/5, siendo creo la nota más baja que he dado a nada en 8 años. De cualquier forma, de momento esto es todo de mi parte. De nuevo, recordad seguir el blog a través de los botones de la derecha así como mis redes sociales 🙂 y ¡no olvidéis comentar si os ha gustado la entrada! ❤ ¡Se os quiere!

Que sepas que es muy entretenido leer las cronicas de cine de los lunes, aunque no consigo encontrar la forma de hacer comentarios. 😅 Vaya nota que se han ganado en Thor, uf 1,5. Seguro que se lo merecen. Besos hija
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Bueno, creo que lo has conseguido 😜 gracias por comentar!
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