Viernes de series: Los 100

¡Buenas, brujines! ¿Me echábais de menos? ¿Con ganas de tener más noticias sobre series que lo están petando ahora mismo? Pues, sin más dilación, aquí tenéis una de las últimas que he terminado en este mes, esperando que la disfrutéis como siempre 🙂 ¡Comenzamos!

La Tierra. Una guerra nuclear que destruyó toda condición de habitabilidad hace un siglo. De entre todos los humanos, algunos consiguieron escapar al espacio haciendo un pacto entre diversas naciones. El Arca, la enorme estación que orbita alrededor de la Tierra, alberga ahora a humanos de toda condición que consiguieron salvarse y prosperar a partir de lo poco que tenían tras la «gran explosión». Sin embargo, los problemas parece que sólo acaban de empezar cuando uno de los ingenieros del Arca se percata de que los niveles de oxígeno no sustentarán tantas vidas en un futuro cercano. Así, Jaha, el último Canciller del Arca, decide adelantar el proyecto de aterrizaje de conejillos de indias humanos en la Tierra para evaluar si las condiciones vuelven a ser habitables. Así, cien adolescentes y jóvenes del Arca, prisioneros de la misma por diversos motivos, serán enviados a una superficie ignota… ¿Sobrevivirán a una Tierra herida desde hace un siglo?

RESEÑA

Bueno, bueno, bueno… Pues volvemos con fuerza a las reseñas de series, y disculpas como siempre por la demora entre unas y otras. En este caso, en especial, tras haber visto la serie casi del tirón en los últimos meses -durante el confinamiento, seamos honestos- y casi viendo los últimos tres capítulos al día según se estrenaban en Estados Unidos, quería hacer una entrada especial sobre esta serie con la que he sufrido y disfrutado a partes iguales. Y, ¿qué mejor que conocerla a través de sus personajes y dúos más icónicos?

Recordatorio: MIS RESEÑAS TIENEN SPOILERS 🙂 GRACIAS

• Clarke: «Todo por amor»

Clarke es, sin duda, la protagonista indiscutible de esta serie. Desde el primer capítulo hasta el último, considerando todos los factores, es la que acaba liderando al grupo. Y, a veces, consiguiendo que casi los maten a todos. De ahí su apodo: «Wanheda», comandante de la muerte. Porque, si algo caracteriza a Clarke, es que sería capaz de hacer lo que fuese por aquellos que quiere, incluso matar a grandes cantidades de personas por el bien común. Clarke es la genocida por amor de esta historia, la que considera que todo lo que hace por salvar a los suyos era lo correcto, aunque duela mucho.

Y cuando Madi entra en su vida, descubre que aparte de todo tiene alguien más por quien vivir, de cualquier manera. Atrás quedaban Finn, Nayla, Lexa y algunos otros, fueran de sexo masculino o femenino (sí, Clarke Griffin se convirtió en un icono bisexual al poco de empezar la serie, a partir de su relación con la Comandante Lexa kom Trikru :)). Pero, sin duda alguna, Clarke será siempre el personaje con más «dudas» de esta historia. ¿Qué es lo que realmente quiere? ¿Qué está dispuesta a sacrificar para conseguirlo? Lo podéis descubrir en estos 100 capítulos de serie…

• Bellamy: «El veleta»

Otro personaje que, sin duda, era considerado el co-protagonista de la serie hasta casi el final de la séptima temporada. Un antagonista, digamos, de los intereses de Clarke que al final terminó siendo casi como el hermano mayor de todos. Con ese aspecto de chico grandote y a veces sobreprotector, sobre todo con su hermana Octavia, Bellamy nos va demostrando que a veces para sobrevivir conviene cambiar de bando según te convenga, todo por salir adelante. Incluso, a veces, cuando te consiguen convencer con una teoría que te indica una luz al final del túnel y otros no lo entiendan.

Lo cierto es que, sin duda, este personaje casi lo único que hace durante las siete temporadas es pegar bandazos de un lado al otro, que si «ahora sí», que si «ahora no», que si luego me voy con este otro porque me conviene más. Desde muy prontito, mi chico y yo apodamos a este muchacho el «Veleta» y no nos ha vuelto a defraudar. Casa uno que mire por lo suyo.

• Raven: «Superación sin límites»

Raven es un personaje curioso. Al inicio, no es parte de los cien enviados a la Tierra, pero acaba bajando por un motivo o por otro. Y, a partir de ahí, a la pobre no hacen más que pasarle desgracias: desde perder a Finn a manos de Clarke hasta quedarse semi-paralítica por culpa de un disparo junto a la columna, Raven es de las que siempre está ahí al pie del cañón pase lo que pase, generalmente con la sensatez por delante. Salvo, quizá, el pasaje de la «Ciudad de la Luz» que a la pobre, again, acaban haciéndola sufrir y provocándole efectos secundarios para sacarla de ahí. ¿Qué tenían con la pobre Raven, de verdad?

Vale que toda la serie era un dramón lacrimógeno digno de la mejor telenovela venezolana, pero es que lo de esta chica no era de rigor. A mí, personalmente, me daba bastante lástima y ternura, a partes iguales. Aunque me encanta su faceta de hacker que acaba arreglando muchos de los entuertos con los dichositos chips de memoria… Un personaje a tener en cuenta como ejemplo 🙂

• Murphy & Emori: «Supervivencia eterna»

Estos, sin duda, se tenían que llevar un capítulo aparte por muchas razones (y no sólo porque al final me acabase enamorando perdidamente de ellos, eso es aparte… Ejm). Primero, porque Murphy es la clásica «cucaracha» que sobrevive aunque le tires una bomba nuclear encima. Este chico, no sé cómo se las apaña, pero sale DE TODAS. Literal. Desde el principio, sabiendo que es una serie bastante bruta de pura supervivencia y organizaciones sociales casi tribales, piensas: «este con lo que hace y dice no va a durar media temporada». Pues, lo adelanto: hasta la séptima y con evolución personal exponencial, así lo digo.

Emori, por otra parte, es un personaje que sólo conoceremos a partir de la segunda o tercera temporada. Una joven nacida con un defecto físico en la mano izquierda que provocó su expulsión temprana de su clan, en medio del desierto. Por suerte, su hermano mayor estuvo con ella en todo momento y salieron adelante hasta llegar a la edad adulta. Claro que, poco después, los primeros Skaikru se cruzaron en su camino en busca de la Ciudad de la Luz. Y, ¿a quién conoció Emori?

Exacto. La verdad es que el principio de la relación entre estos dos, aunque parecía que iba a ratos -ahora te doy agua, ahora te pongo un cuchillo en el cuello- tampoco llamaba especialmente la atención. Sobre todo porque, como digo, Murphy empieza siendo un personaje bastante odioso. Una persona que no se preocupa por nada ni nadie salvo él mismo, que busca la forma de sobrevivir como sea y (como Bellamy) asociándose al inicio con quien le conviene para salir adelante.

Pero veremos que Emori, caminando a su lado temporada a temporada, acabará cambiando un poco esa actitud veleta de Murphy y revelará, aunque de a poquitos, su verdadero carácter. Murphy es el clásico malote independiente… hasta que aparecen unos ojos oscuros que lo cautivarían y por los que haría lo que fuera. Uy, espera… Esa historia me suena, ¿verdad? 🙂

No obstante, considero que no es hasta casi la sexta temporada cuando, de verdad, vais a entrar por el aro y dejaros cautivar de verdad por el dúo #Memori (hasthag oficial en Twitter, que no lo digo yo…). En los recovecos de un nuevo mundo, un planeta nuevo, Murphy tomará una decisión que a mí, personalmente, me llegó al alma. Aunque aviso que antes de eso, al escuchar la idea por primera vez, casi lo estrangulo de nuevo. Yo no doy más pistas esta vez… ❤

Eso sí, el final… ¡Qué final! Cierto que creo que a los guionistas se les fue un poco la mano al Deus ex Machina cuando terminé la serie y vi algunas cosas, pero oye: ¡me alegré por Memori, qué carajo! 😛

• Monty & Harper: «Pasando testigos»

Otra pareja que, hasta su adiós al final de la quinta temporada, me tuvieron cautivada desde poco después de empezar su relación. Al inicio, pensaba que iba a ser como todas las relaciones en la serie: o se rompían por algún motivo o acababa alguno de los dos espichándola… O los dos. Sí, esta serie es muy así, hay que decirlo. Es «la ley del más fuerte». No obstante, Monty y Harper, sin ser de los grandes cabezas de cartel, consiguieron mantenerse más o menos en la cuerda floja durante las temporadas que les correspondieron y, gracias a las estrellas, tuvieron un final feliz que se merecían, sin duda.

Una familia feliz hasta el fin de sus días, saliendo de la norma de la serie pero dando un punto agradable a tanto desastre, desde luego. Aunque en dos temporadas, confieso, no me dio tiempo a decidir si el bueno de Jordan (retoño) todavía me caía bien o mal… 😀 Sólo diré que considero que le quedaba mucho por aprender y parecía un bebé con el cuerpo de un tío de veinte años, pero bueno… Cosas que se pueden ir solucionando con el tiempo, ¿no? 🙂

• Octavia: «la montaña rusa»

Y, por último pero no menos importante, Octavia Blake. La Reina Roja. La Luchadora. La Superviviente por excelencia. Recuerdo que, tras empezar a ver la serie, vi un tuit acerca de la sexta temporada que decía: «Y tú, ¿eres team Octavia o team Clarke?». Y yo pensando: «si es que no me cae bien ninguna de las dos. Clarke es una bestia parda autosuficiente y Octavia una niña mona a la que raptan los malos por boba». Sin embargo, no es todo como empieza sino como acaba. Y, dentro de lo que cabe, hay que admitir que Octavia es de esas que los tiene del tamaño de balas de cañón.

Pasado el primer susto de Rapunzel cayendo al mundo real -la muchacha estuvo encerrada bajo el suelo de una cabina del Arca durante unos dieciséis años, más o menos-, Octavia tiene un cambio radical que también he visto en gente que conozco tras vivir una vida muy estricta y «cerrada»: el desmadre. De repente, no quiero saber nada de mi familia, prefiero salir a explorar mundo y me enamoro del primer tío buenorro que se cruza en mi camino, aunque al principio parezca que me quiera matar.

Pero eso también nos muestra que, donde Raven por ejemplo era más ejemplo de superación física, Octavia es la capacidad de superación emocional por excelencia y el proceso de madurez con sus luces y sus sombras. La fase de la Reina Roja, sin duda, es de las más duras que tiene la serie y a Octavia, a pesar de todo, reconozco que yo la juzgué con más dureza quizá de la necesaria.

Aparte de todos estos personajes, por supuesto, existen muchos otros en la serie que condicionan, para bien o para mal, el desarrollo de los acontecimientos. Algunos entrañables podrían ser Lexa, Madi, Indra y su hija Gaia, la madre y la hija Diyozas, Marcus o incluso Beca, la científica que da lugar a todo este desastre. De hecho, creo que tengo ganas de saber más de qué ocurrió con ella y con los primeros terrestres en la precuela que van a sacar de la serie, «Anaconda». Seguiremos atentamente la información que vaya saliendo 🙂

Por otro lado, tienes a algunos muy odiosos entre los habituales como pueden ser Jasper, Abby o Jaha, los cuales al final acaban poniendo más en problemas a sus compañeros que ayudarlos a salir adelante. Y no, estos no tienen un momento revelación a lo Murphy que les diga por dónde tirar. Algunos incluirían en esta categoría también a Bellamy, pero eso os dejo que lo juzguéis vosotros a través de la propia serie 🙂

Por mi parte, poco más que decir que a esta serie le pondría un 3.5/5 -sí, el tema telenovela sobre todo de las primeras temporadas harta un poco y a veces es hasta forzado- y os recuerdo que, tanto si os gustó como si no, podéis dejar vuestra opinión en los comentarios debajo de la entrada. ¡No olvidéis darle a «Me Gusta» en la estrellita!

~Your fight is over. May we meet again~