¡Buenas tardes, amores jugones! ¿Cómo van esas pilas, cargadas todavía? Por aquí seguimos como siempre trayendo buen contenido de calidad, esta vez con un juego que en casa hemos disfrutado como enanos jugando en cooperativo (sólo para dos, de momento, no hay más opciones 😦 ). ¿Queréis saber más sobre esta loca y disparatada aventura matando orcos? ¡Vamos a ello!
Las barreras han caído. Sea como sea, tras la muerte del gran maestro de los hechiceros -y quizá en parte por culpa de nosotros, sus díscolos aprendices- los orcos han encontrado la manera de reagruparse y alcanzar nuestras fronteras. Desde luego, mientras no consigan llegar a los portales que tan celosamente ha guardado siempre la Orden, estamos a salvo y el mundo se mantendrá a salvo. El problema es que eso requerirá de todo nuestro ingenio para frenar el avance de una horda que parece más agresiva y variopinta que nunca… Aunque nos duela, vamos a unir fuerzas y a abandonar nuestras diferencias, querida compañera. Espero que sea suficiente…
RESEÑA
Como algunos sabréis, este juego que reseñamos hoy es parte de la saga «Orcs Must Die», en concreto hoy hablaremos del segundo volumen de la misma 🙂
Como primer detalle que lo diferencia del primer volumen, es que en esta ocasión tenemos la posibilidad -¿qué sorpresa, verdad?- de jugar en cooperativo. Así que entre la oferta en Steam y que en casa somos dos y hemos estado también confinados unos cuantos meses, no se nos ocurrió mejor cosa que darle una oportunidad. Así, ahora aparte de con el mago podemos jugar con su compañera de «felonías», la hechicera. Aunque, claro, todo depende del cristal con que se mire y de quién tuvo culpa de qué en la historia. Y no penséis que ella sólo es sólo para el cooperativo, también la podéis usar jugando en individual a esta secuela.
Como descripción del juego básica y parafraseando a uno de los dos personajes «Bienvenidos al concurso de matar orcos. El juego consiste… en matar orcos»; y creo que no hay mejor definición de en qué consiste este juego… O esta saga de juegos, si contamos que por supuesto hay un primer juego antes de este y hace pocos meses salió el «Orcs Must Die 3».
Así, este juego es un Tower Defense en toda regla en el que el jugador se va a encontrar hordas y hordas de orcos (y no sólo) viniendo a por ti a través de pasillos, túneles y corredores diversos. Cuanto más se avance en el juego, por supuesto, mayor tamaño de escenario y mayor complejidad para proteger los portales a los que los orcos no deben acceder. En ese sentido, el juego cooperativo es muy interesante porque además tienes contacto a través del juego con tu compañero, por voz, y podéis organizaros para preparar las trampas optimizando el dinero que tengáis cada uno y vayáis consiguiendo a medida que matéis orcos.
La única parte que me pareció un poco agridulce de ese asunto en particular es que la cantidad de dinero parecía reiniciarse tras cada nivel, así que no podías acumular oro de uno para otro que te permitiese poner trampas grandotas al primer segundo. Supongo que era una cuestión de equilibrar el juego, pero aun así 😛
Me ha gustado particularmente lo de poder ganar las calaveras para mejorar las trampas, pero también me ha parecido que hay que saber equilibrar qué mejoras y qué no, así como intuir más o menos rápido qué trampas son realmente efectivas. Ahí supongo que también cada maestrillo tiene su librillo, pero está claro que hay trampas mucho más efectivas y menos difíciles de manejar o estar pendiente que otras. En este sentido, respecto a los DLC y las compras con dinero, persolmente nos parecieron sólo cuestiones estéticas más que utilizables en el juego, así que mejor jugar con las skins disponibles en el juego y listo.
No perdéis tiempo y os lo pasáis igual de bien. Sólo una advertencia: si queréis cambiar de trampas, estad al loro al principio de cada nivel para cambiarlas que si no no os van a dejar en todo el nivel. Y mismas recomendaciones a la hora de jugar tanto «campaña» como «desafío» (que básicamente son los mismos niveles que la campaña, pero hasta que se te acaba el chollo y te sobrepasan o superas cierta cantidad de olas de orcos). Parte positiva: existe el fuego amigo y entre vosotros no os vais a hacer daño; tampoco las trampas o las carretas os van a hacer nada si pasáis por encima, así que… ¡A poner trampas como si no hubiese un mañana!
Al juego creo que le daría un 4.5/5 y espero poder traeros pronto la reseña de la tercera parte. Esto es todo por mi parte de momento. Recordad seguir el blog a través de los botones de la derecha así como mis redes sociales y ¡no olvidéis comentar si os ha gustado la entrada! ❤
El Rincón Escritor de Paula 