Lunes de cine: Todos los hombres del presidente

Buena tarde, ratones. Espero que estéis bien y empecéis con ganas la semana. Y si no, aquí os traigo una reseña atípica -lo sé- para la sección, pero que espero que disfrutéis tanto como yo disfruté la película cuando tuve ocasión de verla en el cine en verano de 2023. ¿Os venís a la América de los 70? 🕵️📰

SINOPSIS

Nos encontramos en 1970, presidencia de Richard Nixon en los Estados Unidos. Bob Woodward y Carl Bernstein son dos periodistas del Washington Post que un día se topan con una extraña noticia de una incursión nocturna en el edificio Watergate. Poco a poco y siguiendo muy diversas pistas, a cada cual más sorprendente, desentrañarán un complicado entramado de corrupción que involucra a altos funcionarios del gobierno, incluyendo al presidente de los Estados Unidos, Richard Nixon. A medida que Woodward y Bernstein profundizan en el origen del incidente en Watergate, se enfrentan a intimidaciones, amenazas y peligros, pero su perseverancia y dedicación eventualmente conducen a la revelación del escándalo y a la renuncia de Nixon… ¿Cuánto tendrán que sacrificar en el proceso?

RESEÑA

⭐⭐⭐⭐✨

Pues, como comentaba al principio de la entrada, efectivamente el verano pasado se me presentó la oportunidad de volver a ver varias películas en el cine aquí en Bruselas, coincidiendo con el aniversario de la Warner Bros. Así, los cines UGC de la ciudad hicieron programa durante varios meses de proyectar uno o varios clásicos de la productora en versión original y en pantalla grande, para disfrute de aquellos que vivieron su estreno en su momento y también para enganchar al buen cine a las nuevas generaciones.

En mi caso, debo decir que no había tenido ocasión hasta ahora de ver esta joyita y me alegro de haberlo hecho en versión original, incluso considerando que los acentos de varios de los actores y actrices -sobre todo de los hombres, que sí, son mayoría en esta trama de los 70 donde casi todos los que trabajaban en puestos de responsabilidades eran ellos… bla bla- eran bastante fuertes y cerrados en muchos casos.

Por otra, parte no soy una grandísima fan de las películas basadas en hechos reales o incluso de investigación periodística, pero creo que con esta película se sienta un precedente que pica la curiosidad para ver otras cintas similares. El trabajo de un Dustin Hoffman al que para mi generación sorprende verle con tanta melena, y un Robert Redford que tiene su fama muy merecida, te mantiene enganchad@ a la trama durante las 2 horas y 18 minutos que dura.

Si además el espectador conoce un poco de antemano o ha oído hablar alguna vez del «escándalo Watergate», destapado apenas 4 años antes del estreno de la película y 2 antes de la publicación de los Woodward y Bernstein («Woodstein», no es broma) auténticos de la novela basada en su trabajo periodístico que provocó la caída de Richard Nixon, es cierto que a lo mejor quita un poco de emoción a la trama… Pero no mucha, de verdad ;) Yo sólo conocía los conceptos básicos, pero no sabía de que iba la vaina y creo que por eso me enganchó la curiosidad todavía más.

Por otro lado, los que hayáis visto Futurama encontraréis incluso cierta ironía al ver alguna de las imágenes de Nixon -reales- y el inmenso parecido que consiguió Matt Groening en su éxito de ciencia ficción… :) Quien sabe, al margen de Watergate es posible que sea interesante saber más sobre un personaje que sin duda ha trascendido en la historia de Estados Unidos de forma mucho más notable que otros presidentes de los que sólo nos suenan en Europa sus apellidos y de refilón…

Por último, reconozco que estuve temiendo lo que pudiese ocurrir hasta el último momento incluso sabiendo que Woodward y Bernstein lograron al menos sobrevivir dos años más para publicar sus memorias :P La tensión está muy bien creada, a través de los ambientes y los escenarios, contraste de la luminosidad de la oficina del Washington Post con los aparcamientos subterráneos o las esquinas nocturnas donde los dos pobres desgraciados tenían que pelear cada onza de información y llegar a algún sitio…

Con todo esto, sólo puedo reiterar la recomendación para todos aquellos que disfruten del buen cine, ya sean amantes del género periodístico o no demasiado, porque es una buena muestra de que en estos años de atrás -previos a 2020, diría- y décadas se ha hecho muy buen trabajo, sea más acorde o no a la mentalidad de la época, pero sin meterse en chorradas políticas sin necesidad. O, al menos, no da la impresión de que tengan diálogos metidos con calzador por agradar a los espectadores… ;)

Y esto es todo por mi parte de momento. Recordad seguir el blog a través de los botones de la derecha así como mis redes sociales 🙂 Ah, y ¡no olvidéis comentar si os ha gustado la entrada y si habéis visto la película me encantará saber vuestra opinión! ❤ ¡Os quiero!